Claves para no enfermarse en invierno
El que viene no es un invierno más. Es el segundo invierno que viviremos bajo el influjo de la pandemia, que si algo bueno nos dejó, es la conducta para ser sanitariamente más responsables con nosotros y con los demás.
Naturalmente, esta estación del año trae consigo el frío, y con él hay un aumento de la circulación de virus y bacterias que pueden poner en riesgo nuestra salud, sobre todo en lo que tiene que ver con afecciones respiratorias. Por lo cual haber aprendido a cuidarnos más, es un hábito que debemos reforzar.
Pero para cuidarnos de esto, no alcanza con el viejo consejo de salir más abrigados. Vamos a repasar una serie de conductas que podemos adoptar para que nuestro sistema inmunológico esté bien preparado.
No al estrés.Los nervios y la ansiedad, cuando se mantienen en el tiempo, debilitan nuestro sistema inmune. Tenemos que encontrar hábitos en nuestra vida cotidiana que nos permitan vivir con mayor distensión.
Sí al buen descanso.Dormir no siempre significa descansar. Para lograrlo, el sueño tiene que ser de calidad para aumentar la capacidad de nuestro sistema inmune de defendernos frente a una infección futura. Lo ideal es tener una rutina que nos permita dormir entre siete y nueve horas por día a los adultos y a los niños unas diez horas o más.
No a la automedicación.Ante cualquier síntoma, siempre tendemos a tomar algún medicamento que tengamos a mano. Pero esta no es una sana costumbre. Siempre sigamos la recomendación de un médico cuando haya que apelar a un comprimido.
Sí a la buena alimentación.Adoptar hábitos alimentarios saludables es quizás uno de los puntos más relevantes para que nuestro sistema inmune sea más eficiente. Los más recientes descubrimientos en inmunidad señalan el valor que tienen los probióticos para fortalecer las defensas de nuestro cuerpo. Cada vez hay más evidencias de que ellos pueden brindar protección frente a las infecciones respiratorias y el resfriado común. En ese sentido, Vital+ es un producto que nos aporta probióticos, por lo cual es una buena decisión tenerlo en la heladera.
A todo esto, hay que sumarle los cuidados habituales que tenemos en función del contexto como el uso del tapabocas, el lavado de manos, la distancia social y la ventilación de los ambientes, además de una buena selección de series para hacer más llevaderos los meses más fríos del año.